Los principales
bancos centrales no se enfrentaron más a las llamadas para impulsar la economía
mundial al Grupo de los Siete ministros de Finanzas que se reunieron el sábado,
dijo el presidente del BCE, Mario Draghi.
Antes de la
reunión del ministro de Finanzas británico, George Osborne, dijo que los
ministros "consideran que el activismo más monetaria puede hacer para
apoyar la recuperación" - algo que tiene mucho interés para el Banco de
Inglaterra.
Pero Draghi dijo
que el BCE, que recortó las tasas de interés a un mínimo histórico la semana
pasada, no ha venido bajo presión para adoptar nuevas medidas.
"No hubo
ninguna llamada ", dijo a los reporteros después de la reunión. "Es evidente que todos los bancos centrales han hecho
mucho, cada uno dentro de su propio mandato. Así (la reunión) fue simplemente
tomando nota de esto. Todos nosotros realmente hemos estado activos."
El BCE también
está estudiando si se puede hacer más para promover préstamos a pequeñas
empresas en la zona del euro a través de valores respaldados por activos (ABS),
pero Draghi dijo que el banco central estaba en mejores condiciones para ayudar
a otras instituciones europeas en lugar de asumir un papel de liderazgo en sí.
ABS permite a
los bancos que se muevan con un poco de riesgo de crédito de sus balances de
préstamos de embalaje y en los cuales podrán venderlos a otros inversionistas. Los mercados de crédito estaban paralizados durante la crisis
financiera, cuando dichos valores se convirtieron en tóxica debido al impago de
los préstamos de vivienda que los sustentaban.
"¿Cuál es
el papel del BCE en esto? Creo que es sobre todo catalítico, ya que el BCE
trabaja con el Banco Europeo de Inversiones y de la Comisión, y creo que va a
ser mucho más a estos actores a actuar, en lugar que el BCE ", dijo
Draghi.
Le restó
importancia a las sugerencias de que el BCE estaba considerando un programa
similar al Banco de Inglaterra para la financiación del plan de préstamos, y
señaló que el BCE ya permite a los bancos utilizar préstamos para pequeñas
empresas como garantía en sus operaciones de financiación.
El ministro de
Finanzas Alemania, Wolfgang Schaeuble, quien estuvo en la reunión del G-7
celebrada a 40 millas fuera de Londres, ha señalado su oposición a la compra de
valores respaldados por activos del BCE, diciendo a su partido que sería de
"financiación estatal encubierta".
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